El hotel boutique y complejo oleoturístico presenta una colección de espacios con diferentes estilos y diseños pensados para ser el escenario ideal en un entorno único que hará del día del ‘Sí quiero’ un acontecimiento inolvidable.
La Canonja (Tarragona), octubre de 2019. – Clásica, romántica, campestre, urbana, chic, vintage o temática, existen tantos estilos de bodas como novios se dan el ‘Sí quiero’. Porque no existe una elección mejor que otra a la hora de escoger el tipo de celebración, sino que la forma de casarse va más bien con la personalidad de cada pareja, su forma de ser, sus gustos y preferencias. De hecho, la boda más especial será aquella que más se acerque a lo que siempre habían soñado, por ello se trata de un evento tan especial que se prepara con mucho mimo, pasión e ilusión.
Conocedor de ello y para facilitar la labor de escoger el lugar de la boda, el hotel boutique y complejo oleoturístico La Boella presenta su repertorio de espacios con una amplia variedad de salones de diferentes estilos complementados con unos elegantes jardines y una completa oferta de servicios para que el esperado día sea perfecto y se encuentren espacios adaptados a cada necesidad.
Una colección de espacios para celebrar el día del ‘Sí quiero’
Situado en una finca agrícola de 110 hectáreas y jardines en La Canonja, a 10 minutos de Tarragona, La Boella se presenta como una opción ideal para celebrar bodas que cuida cada detalle para que el evento se mantenga en la memoria de todos los invitados como un día inolvidable. Un hotel con mucho encanto que cuenta con espacios para cada momento de la ceremonia adaptados a todos los gustos y necesidades:
1. El Patio Central, un altar al aire libre
Este espacio diáfano se adapta especialmente a celebraciones civiles de cualquier estilo. Su majestuoso portal de madera y un entorno rodeado de hiedras conforman un altar natural que recrea una atmosfera mágica con un toque de distinción y romanticismo que no dejarán indiferente.
2. Los Jardines Encantados, para una boda al estilo campestre
Para una boda más rústica, los jardines son un lugar idílico. Poblados de plantas de diferentes especies como naranjos, magnolias, lavanda y romero, albergan una refinada fuente de piedra que los convierten, sin duda, en el lugar perfecto para celebraciones primaverales o veraniegas.
3. El Gran Pabellón, para una celebración “a lo grande”
Si los novios son de familia numerosa, el Gran Pabellón tiene a su disposición más de 600 m2 ampliables a los jardines para que nadie se quede sin sitio en el gran día. Es el lugar ideal para bodas tradicionales que van a acoger a un gran número de invitados.
4. El romanticismo de los Salones Dorados
Luz tenue, colores cálidos y paredes de piedra, estos salones se convierten en el espacio más romántico de todo el hotel La Boella. Se trata de tres espacios independientes que se comunican entre sí, ubicados en el lugar donde anteriormente estaban alojadas las bodegas de la finca.
5. El Salón de Actos y la Sala Ejecutiva, una boda en petit comité
El Salón de Actos permite la celebración de bodas clásicas que no requieran de demasiado espacio, especialmente pensado para aquellos que prefieran ‘dar el paso’ rodeados de los más cercanos. La Sala Ejecutiva es un espacio contiguo más reducido, ideal para banquetes y comidas para estas bodas más íntimas.
6. La Sala Celler Botiga, para abrir boca de la mejor forma
En una boda a menudo la novia se hace esperar. Para apaciguar los nervios y entretener a los invitados, un aperitivo siempre es buena opción. Para ello, el hotel cuenta con la Sala Celler Botiga, un espacio ubicado en la vinoteca de La Boella que ofrece la posibilidad de realizar refrigerios antes del enlace o en cualquier otro momento de la celebración.
7. Para lo que pasa antes del “Sí, quiero”, en el Salón Privado
Un encuentro de familiares que hacía tiempo no se veía, el hermano de la novia que quiere repasar el poema que va a leerle o una conversación íntima y secreta son algunos ejemplos de situaciones que pueden requerir intimidad. Para ello, el Salón Privado ofrece una gran privacidad, así como una gran comodidad y la sensación de “estar como en casa”.
El confort de celebrar una boda en La Boella
Una de las principales bazas con las que juega este hotel boutique es que dispone de restaurante propio y ofrece a los invitados menús cuidadosamente elaborados por su chef con una cocina elaborada con productos de proximidad. Al estar situado junto a los salones de celebraciones, la frescura, textura y sabor de los platos se encontrará en su momento óptimo para ser degustados en toda su plenitud por los comensales.
Asimismo, el hotel cuenta con una cuidada oferta de servicios para no dejar nada al azar y que todo esté perfectamente planeado, como asesores de maquillaje y peluquería, servicios de autobuses para los invitados, personalización de eventos e, incluso, una aplicación para gestionar y controlar online la coordinación del banquete.